En la evidente lucha por liderar la representación institucional de los pacientes, una de las organizaciones parece haber tomado una notable ventaja gracias a la firma de un convenio marco de colaboración con el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Se trata de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP), que no se sabe con certeza si es más o menos representativa, seria, activa y útil que las al menos otras dos con las que se disputa a un colectivo tan codiciado como ninguneado en el sistema sanitario. Pero la firma de este acuerdo, de indudable alcance y consecuencias tangibles, eleva las posibilidades de futuro de la iniciativa liderada por Tomás Castillo, por encima de sus dos competidoras: el Foro Español de Pacientes y la Alianza General de Pacientes.
El convenio parte del famoso latiguillo el paciente constituye el eje del Sistema Nacional de Salud (SNS). También recoge que “la participación de pacientes o representantes de asociaciones de pacientes constituye un derecho democrático que permite mejorar la calidad del servicio asistencial y los resultados en salud”. Y finalmente subraya que “el papel de las asociaciones cobra mayor importancia en el mantenimiento y buen funcionamiento del SNS en los complejos momentos actuales”. Abre así la puerta a la participación de los pacientes en materias propias de la política sanitaria, tales como la equidad y la cohesión del sistema o el manejo y control de las enfermedades”.
Esta participación se va a materializar en la inclusión de los pacientes en el Consejo Consultivo del Consejo Interterritorial del SNS, en su implicación en las actuaciones de formación y empoderamiento que se lleven a cabo desde el Ministerio y en la participación de forma activa en las estrategias de salud del SNS. Además, los pacientes podrán conocer los proyectos normativos impulsados por la Administración General del Estado, así como formular propuestas de actuación de carácter orientador. La POP logra así culminar uno de sus propósitos fundacionales: representar a los pacientes para poder influir en la elaboración de las leyes y que estas recojan de alguna manera sus reivindicaciones.
Ahora bien, la satisfacción no puede ser completa para la POP por dos razones que invitan a pensar que la batalla por representar a los pacientes está lejos de haber concluido. Primero, que el Foro Español de Pacientes no se da por vencido y ha criticado tanto el convenio por no incluir a todos los pacientes, como a la Plataforma por crear división en el movimiento asociativo. “Es un acuerdo de un grupo de organizaciones de pacientes con el Ministerio, pero falta el resto”, ha declarado su presidente, Andoni Lorenzo, partidario de un acuerdo del Ministerio con todas las organizaciones, incluyendo al propio Foro y a la Alianza, que aún no ha dicho nada al respecto.
Y luego se da la circunstancia de que el convenio ha sido anunciado tan solo por la POP, no por el Ministerio. Tampoco hay constancia de imagen gráfica que rubrique el acuerdo. Una triste imagen de archivo acompaña a una información que aspira a ser histórica pero que, desde luego, no lo aparenta. Cabe pensar que la ministra Montserrat está considerando un acuerdo más amplio, que incluiría a otras organizaciones, o bien eligiendo un momento más propicio para saludar un acuerdo con un colectivo tan importante como los pacientes. En cualquier caso, lo que los pacientes (algunos de ellos) interpretan como un paso de gigante en la búsqueda de autoridad institucional, la Administración apenas lo menciona. Continuará…